Guerreros de la libertad total

– Sin tristeza ni añoranza uno no está completo, pues sin ellas no hay sobriedad, no hay gentileza. Decía que la sabiduría sin gentileza y el conocimiento sin sobriedad son inútiles.

– Los guerreros de la libertad total eligen el momento y la manera en que han de partir de este mundo. En ese momento se consumen en un fuego interno y desaparecen de la faz de la tierra, libres, como si jamás hubieran existido.

La importancia personal es nuestro mayor enemigo. Aquello que nos debilita es sentirnos ofendidos por los hechos y malhechos de nuestros semejantes. Nuestra importancia personal requiere que pasemos la mayor parte de nuestras vidas ofendidos por alguien.

2 (19)

– Destruir hábitos desprende a la conciencia de la absorción en sí misma y le permite libertad a su resplandor para enfocarse en otras cosas.

– En la vida de los guerreros era extremadamente natural el estar triste sin una razón aparente. Dijo que la mejor manera de deshacerse de la melancolía es reírse de ella.

– No hay nada más solitario que la eternidad. Y nada es para nosotros más cómodo que la condición humana. Esto es ciertamente otra contradicción. ¿Cómo puede el hombre conservar los vínculos de su humanidad y al mismo tiempo aventurarse, con gusto y con propósito, en la absoluta soledad de la eternidad? Cuando logres resolver este acertijo estarás listo para el viaje definitivo.

– No somos nada, pero ¡qué maravillosa contradicción! ¡Qué desafío! ¡Que unas nulidades como nosotros puedan enfrentarse a la soledad de lo eterno!

– No existe un mundo de objetos, sino sólo un universo de campos energéticos que los videntes llaman las emanaciones del águila, y cada uno de nosotros está envuelto en un capullo que encierra una pequeña porción de estas emanaciones. La conciencia de ser es el producto de la constante presión que ejercen las emanaciones exteriores, llamadas emanaciones en grande, sobre las emanaciones interiores. La conciencia da lugar a la percepción, que ocurre cuando las emanaciones interiores se alinean con las correspondientes emanaciones en grande.

La quinta verdad, es que la percepción es canalizada porque en cada uno de nosotros hay un factor llamado el punto de encaje, que selecciona emanaciones internas y externas para alinearlas.

El determinado alineamiento que percibimos como el mundo es producto del específico lugar en nuestro capullo donde está localizado nuestro punto de encaje.

– Los nuevos videntes llaman a las emanaciones puestas en relieve el lado derecho, la conciencia normal, el tonal, este mundo, lo conocido, la primera atención. El hombre común lo llama, racionalidad, realidad, sentido común.

Lo desconocido propiamente dicho consiste en el resto de las emanaciones que no son parte de la banda humana y que jamás son acentuadas. Los videntes las llaman la conciencia del lado izquierdo, el nagual, el otro mundo, lo desconocido, la segunda atención.

– Si el punto de encaje alinea otras emanaciones interiores, diferentes a las normales, los sentidos humanos perciben de maneras inconcebibles.

Carlos Castaneda: El fuego interno