La espiritualidad no te salvará

Esta cosa de lo «espiritual» necesita ser desempaquetada.

Eso de trascender el mundo, ser inmune al sufrimiento del mundo, alejarse del mundo para entrar y contemplar tu ombligo, lograr un estado superior de conciencia en el que nada te toca. Todo esto … ya no es relevante hoy.

La espiritualidad no te salvará

Para empezar, no puedes trascender el mundo. No puedes hacer eso. No tiene sentido. La cruda realidad es que estás aquí. Simplemente no puedes escapar de estar aquí en esta experiencia. Convertirse en espiritual no es una ruta de escape viable … excepto en la imaginación. Te imaginas que puedes hacer cosas espirituales, puedes volverte más espiritual, puedes progresar en el camino espiritual … y que estarás en un capullo contra el dolor y el horror del mundo.

Amigo, la espiritualidad no te salvará. Simplemente te encarcelará. Serás aprisionado por tu imaginación, aprisionado por tus expectativas y tu esfuerzo y tu esperanza de salvación.

Amigo mío, solo hay una respuesta a tu dolor y a tus problemas. Estar absolutamente presente y absolutamente abierto en medio de la condición humana. No solo a veces cuando estás en el cojín meditando. No solo a veces cuando estás sentado con un maestro espiritual. No solo a veces cuando te sientes feliz y tienes ganas de estar presente y abierto. Sino siempre, siempre, siempre.

Cuando dejas que el sufrimiento te penetre por completo, cuando dejas que la injusticia traspase tu corazón … esto es gracia. La gracia no es un estado que te eleva por encima de la experiencia humana. Es simplemente la ausencia de resistencia a lo que hay aquí. Cuando dejas que el mundo te destruya, cuando dejas que el mundo te aniquile, es posible que tengas la suerte de convertirte en un amante de lo que es. No tiene nada que ver con que te guste o no te guste tu experiencia. Tiene todo que ver con la ternura y la más profunda aceptación.

La cuestión es que la naturaleza de la existencia es la dualidad. No hay nada que puedas hacer al respecto. Hay nacimiento, hay muerte. Hay arriba, hay abajo. Hay luz, hay oscuridad. Y así sucesivamente y así sucesivamente y así sucesivamente. Las olas de la vida continúan… desde el principio de los tiempos hasta el final de los tiempos. No hay nada que puedas hacer al respecto. La aceptación más profunda de esta dualidad es la libertad.

Cuanto más aceptas, más permites, más te inclinas ante la vida tal como aparece en tu experiencia, más caerás en un estado de tal bondad, tal ternura, tal belleza, tal riqueza y profundidad, que todo intento de despertar para escapar de la realidad será visto como infantil e inútil. Y todos los intentos de ser más espirituales serán vistos como inútiles.

Amigo mío, la única salvación está aquí y ahora. No hay escapatoria, solo esto.

Solo esta presencia sin adulterar y una apertura inquebrantable.

Amoda Maa