Liberación de la negatividad

Vamos a examinar las ventajas y los costes del paradigma de responsabilidad-atrac­ción-creación. Por supuesto que éste te ha sido considerado como formando parte de un trabajo general sobre uno mis­mo y no como un enfoque aislado para la liberación de la negatividad.

El «coste» de esta postura se comprende fácilmente. Se pierden simplemente las «ventajas» de la actitud de víctima descrita al final del capítulo 4, a saber: no podemos ya quejar­nos durante todo el día, ni atraer la simpatía de la gente con nuestros infortunios. No tenemos justificación fácil para nuestras frustraciones, nuestra cólera, ni nuestros fracasos. No podemos censurar a los otros ni manipularlos cargándolos de culpa. No tenemos ninguna vía de escape a nuestras emo­ciones negativas programadas desde la infancia, y debemos encontrar otro medio, más eficaz si es posible, para afrontar a nuestra negatividad y para desembarazarnos de ella.

Liberación de la negatividad

En cuanto a las ventajas, son muchas y las dividiremos en dos categorías. Por una parte, el contexto de responsabilidad facilita la liberación de la negatividad, y por otra, permite un completo desarrollo de las más bellas cualidades del ser. En el transcurso de este capítulo examinaremos el aspecto de la li­beración según este nuevo paradigma.

Observaremos por tanto a continuación qué produce el contexto de responsabilidad-atracción-creación en relación a una liberación interior, cuando elegimos funcionar a partir de éste en la vida cotidiana. Estas observaciones han sido he­chas a partir de la experiencia de millares de personas que han elegido percibir sus vidas a partir de este contexto. No se tra­ta, por lo tanto, de meras especulaciones o esperanzas, sino que son experiencias vividas.

Una de las primeras consecuencias de la aplicación del principio de responsabilidad es la liberación de las emocio­nes negativas.

El contexto de responsabilidad facilita la transformación y la liberación de todo el arsenal de emociones negativas tales como el miedo, la cólera, el resentimiento, el rencor, el senti­do de injusticia, los celos, la censura, el juicio, la culpabilidad, etc.Es una de las consecuencias más importantes del contex­to de responsabilidad.

Este contexto permite controlar el yo inferior de forma flexible y no coercitiva. Permite sustituir la substancia men­tal-emocional de baja calidad hecha de negatividad, de orgu­llo, de separatividad y de victimitis por una substancia men­tal-emocional de calidad superior cuyos componentes son: sabiduría, equilibrio, serenidad, inteligencia, amor, etc.

Notaremos algunos de los ejemplos de emociones nega­tivas más corrientes cuya liberación puede ser facilitada por el contexto de responsabilidad. Decimos voluntariamente que «facilita», ya que así como lo hemos mencionado ante­riormente, en lo que concierne a las emociones negativas que tienen sus raíces profundamente ancladas en el inconsciente a causa de experiencias de la niñez o incluso de vidas pasadas es necesario a menudo combinar con la práctica de estecontex­to un trabajo de liberación emocional con una técnica apro­piada, para liberar la energía que ha quedado encerrada en el curso de esas experiencias. El contexto de responsabilidad puede ser un instrumento de liberación suficiente en sí mis­mo, porque facilita enormemente el trabajo de liberación emocional cuando éste es necesario. Además, una vez que la liberación ha sido efectuada, el contexto de responsabilidad permite mantener los resultados con mayor facilidad.

Annie Marquier: El poder de elegir, cap. 10