Coronavirus: el meollo de la cuestión

He llegado a ver el corazón de todo lo que hacemos y experimentamos, individualmente y como especie, como conciencia. Nuestra conciencia. Mi conciencia. Cambiar cualquier cosa en el mundo, incluyéndome a mí mismo, requiere un cambio de conciencia. El único lugar en el que puedo cambiar de conciencia es en mí mismo.

La paradoja del tiempo

La paradoja del tiempo. A simple vista, el momento presente es «lo que sucede». Puesto que los sucesos cambian continuamente, parecería que cada día de la vida consta de miles de momentos en los cuales suceden distintas cosas. El tiempo es para nosotros como una cadena interminable de momentos, algunos «buenos» y otros «malos». Sin embargo, si analizamos más detenidamente, es decir, a través de nuestra experiencia inmediata, descubrimos que realmente no hay muchos momentos. Descubrimos que lo único que hay es este momento.

Deja la vida en paz

Deja la vida en pazCuando puedas, echa una «mirada» a tu interior para ver si estás creando conflicto inconscientemente entre lo interno y lo externo, entre las circunstancias externas del momento —dónde estás, con quién y lo que estás haciendo— y tus pensamientos y sentimientos. ¿Puedes sentir lo doloroso que es oponerse internamente a lo que es?