El conocimiento y el ser

Todo lo que usted aprendió, todo lo que oyó sobre la posibilidad de desarrollo, todo se refiere al ser. Primero de todo, el desarrollo del ser significa despertar, puesto que el rasgo principal de nuestro ser es que estamos dormidos. Mediante el intento de despertar, cambiamos nuestro ser; este es el primer punto. Luego, hay muchas otras cosas: crear la unidad, no expresar las emociones negativas, la observación, el estudio de las emociones negativas, tratar de no identificarse, tratar de evitar la charla inútil… todo esto es trabajo sobre el ser. Es verdad que de este modo usted adquiere cierto conocimiento, pero si es simplemente conocimiento intelectual, se lo pone por separado. El ser es poder, poder «hacer»; y el poder «hacer» es poder ser diferente.

El mito de la liberación

No hay modo alguno de saber nada, porque no hay palabras para referirse a lo que esto es. Y, como ocurre con los recién nacidos, todo se nos ofrece entonces como si lo viésemos por vez primera. Nada tiene nombre y, como Adán en el jardín del paraíso, empezamos a nombrarlo todo desde cero.
Las personas despiertas y las personas iluminadas son meros sueños. El único que quiere despertar es el personaje onírico y, cuando finalmente despierta, resulta que ha despertado del sueño.

Introducción al libro «Despierta del sueño»

Fue nuestro fracaso en despertar del sueño de rebelión lo que puso en movimiento el drama cósmico que culminó con la fabricación del universo físico. Además, es nuestro fracaso progresivo en despertar de nuestros sueños individuales lo que nos obliga a repetir este “drama” de separación en todos y cada uno de los aspectos de nuestro soñar en este mundo. El perdón se convierte en el medio que el Espíritu Santo, la respuesta de Dios a la separación, utiliza para corregir el pensamiento equivocado del Hijo y reunir a la fragmentada Filiación.

Los orígenes de la separación

La capacidad de extenderse es un aspecto fundamental de Dios que Él le dio a Su Hijo. En la creación, Dios Se extendió a Sí Mismo a Sus creaciones y les infundió la misma amorosa Volun­tad de crear que Él posee. No sólo fuiste plenamente creado, sino que fuiste creado perfecto. No existe vacuidad en ti. Debido a la semejanza que guardas con tu Creador eres creativo. Ningún Hijo de Dios puede perder esa facultad, ya que es inherente a lo que él es, pero puede usarla de forma inadecuada al proyectar. El uso inadecuado de la extensión -la proyección- tiene lugar cuando crees que existe en ti alguna carencia o vacuidad, y que puedes suplirla con tus propias ideas, en lugar de con la verdad.

Del sufrimiento al despertar

Del sufrimiento al despertar. Formas de transformar tus emociones
En la raíz de nuestro sufrimiento están las emociones destructivas que el budismo llama kleshas o venenos. En este extracto exclusivo de su nuevo libro, Pema Chödrön nos enseña una práctica de tres pasos para transformar su energía de una causa de sufrimiento en un camino hacia el Despertar.