El poder que ejerces sobre el Hijo de Dios no supone una amenaza para su realidad. Por el contrario, sólo da testimonio de ella. Y si él ya es libre, ¿dónde podría radicar su libertad sino en él mismo? ¿Y quién podría encadenarle, sino él a sí mismo cuando se niega la libertad? De Dios nadie se burla, ni tampoco puede Su Hijo ser aprisionado, salvo por su propio deseo. Y por su propio deseo es también como se libera. En eso radica su fuerza, no su debilidad. Él está a merced de sí mismo. Y cuando elige ser misericordioso, en ese momento se libera. Mas cuando elige condenarse a sí mismo, se convierte en un prisionero, que encadenado, espera su propio perdón para poderse liberar.
Jeff Foster
La vida me excluye
Así son las cosas, en el lugar donde sería de esperar que encontrara una entidad
Continuar leyendo →
30
Nov
Nov
Transurfing
Ola de la suerte
Las personas realmente pueden elegir para sí la felicidad y la suerte. Y, al mismo
Continuar leyendo →
23
Nov
Nov
Espiritualidad Jeff Foster
El mito de la liberación
No hay modo alguno de saber nada, porque no hay palabras para referirse a lo
Continuar leyendo →
19
Nov
Nov
Un Curso De Milagros
El ego inventado
Es razonable preguntarse cómo pudo la mente haber inventado al ego. De hecho, ésa es
Continuar leyendo →
30
Oct
Oct
Jeff Foster
El secreto
¡Qué milagro estar vivo ahora, en este día, en este día de todos los días!
Continuar leyendo →
22
Oct
Oct