Estoy cansada de pensar en positivo

Estoy cansada de tratar siempre de ser un pensador positivo.

Pensar en positivo me hace sentir culpable o temerosa de tener pensamientos «negativos» porque, Dios no lo quiera, eso podría traer más negatividad a mi vida, y ya tengo suficiente.

Hay una manera en que el pensamiento positivo puede sacarnos de la oscuridad, pero no es lo que la mayoría de la gente piensa. No creo que el pensamiento negativo haga que sucedan cosas malas.

Cansada de pensar en positivo

La opresión no ocurre porque culturas y sociedades enteras caminan pensando pensamientos negativos y haciendo que otras personas entren y los asesinen a ellos y a sus hijos.

Hay personas en el mundo que hacen cosas malas. Las catástrofes naturales suceden y hacen que los edificios se derrumben y las casas se vean arrastradas por las inundaciones, o se conviertan en astillas en un tornado. Pero no creo que ninguna de estas cosas suceda porque alguien, en algún lugar, está teniendo pensamientos negativos.

No sé cuál es la causa del mal. No sé la razón detrás de varios desastres naturales. No entiendo, en mi corazón, qué causa los genocidios, aunque estoy aquí porque mi familia sobrevivió a uno. No entiendo la causa de una pandemia. Pero no siento que nuestros pensamientos negativos los hayan atraído.

A veces, suceden cosas, y necesito sentirme enojada. Necesito sentirme mal porque lo estaba. Y necesito sentir una tristeza profunda y aparentemente sin fondo.

Hay poder en honrar esas cosas. Hay poder en honrar nuestra realidad y emociones.

Parte de honrar la realidad es saber que cuando estoy en un montón de escombros, culparme a mí mismo no va a ayudar. Pero mirar dónde podría necesitar fortalecerme para ser de más fuerte ayuda, sí.

Preguntarme si hay lecciones para aprender ayuda.

Preguntarme qué es lo más amoroso y compasivo que puedo decirme ahora mismo ayuda.

No digo que no tengamos que asumir la responsabilidad de lo que no es deseable en nuestras vidas. A veces, tomamos decisiones que tienen consecuencias que no deseamos, para que podamos aprender a perdonarnos y hacerlo mejor.

A veces suceden cosas no deseables que no tienen nada que ver con nosotros, otras veces, nosotros somos los que tenemos que limpiar el desorden. Y la mayoría de las veces, terminamos sanando de cosas que no trajimos sobre nosotros mismos.

Saber la diferencia es importante. Pensar positivamente para mí es saber que, si todavía estoy aquí, ya sea que esté parada o gateando, entonces hay esperanza de que las cosas puedan mejorar.

Pensar positivamente significa recordar las cosas que superé y las que hice cuando pensé que no podía hacerlas.

La positividad es útil para mí cuando estoy en una pila de mierda, y empiezo a imaginar un futuro donde algo mejor existe o podría existir, y doy un paso hacia eso.

Si no estamos donde queremos estar, ya sea a través de las elecciones que hacemos o no, podemos encontrar una manera de avanzar hacia algo mejor.

Si aun no sabiendo cual es, creer que es posible.

Ahí es donde está nuestro poder.

 

Jennifer Finley