Tienes derecho

Tienes derecho a tus pensamientos y derecho a tus sentimientos, tienes derecho a tus deseos y derecho a tus anhelos. Tienes derecho a tu gozo y derecho a tu dolor. Tienes derecho a tu SÍ y derecho a tu NO, tienes derecho a expresar tu verdad y a recorrer tu camino y a ser celebrado por eso. Tienes derecho a meter la pata, derecho a armar todo un lío, derecho a intentarlo y fallar y volver a intentarlo y a cometer errores.

Aceptación

A mi entender, todos nuestros problemas, todo nuestro sufrimiento y nuestros conflictos, tanto personales como globales, se derivan de un problema básico: la ignorancia de quiénes somos realmente. Hemos olvidado que somos inseparables de la vida y, como consecuencia, hemos empezado a temerla, y ese miedo nos ha hecho entrar en guerra con ella de maneras diversas. Hemos empleado nuestros pensamientos, nuestros sentimientos, nuestras emociones y nuestros cuerpos para combatir lo único real, que es el momento presente. Y al intentar protegernos del dolor, el miedo, la tristeza, el malestar, el fracaso…, de todas aquellas partes de la vida que se nos ha condicionado a creer que son malas, negativas, tétricas o peligrosas, hemos dejado de estar verdaderamente vivos.