Frente a la muerte

Me exhorté a mí mismo: “Tengo que mantener mi mente muy clara, muy pura antes de perder el conocimiento. Este es el momento de usar mi atención plena para darme cuenta de la inevitabilidad de la muerte. Si muero pacíficamente con un estado mental puro y claro, mi vida futura será brillante. Quizás logre una etapa de iluminación al ver la verdad de la impermanencia. No debo bloquear mi mente con miedo o confusión. No importa cuán fuerte sea mi apego a la vida, debo dejarlo ahora”. Por lo tanto, hice el esfuerzo para evitar que surgiera cualquier estado mental perjudicial frente a la muerte y alenté a que surgieran estados saludables.

El ego inventado

Es razonable preguntarse cómo pudo la mente haber inventado al ego. De hecho, ésa es la mejor pregunta que puedes hacerte. Sin embargo, no tiene objeto dar una respuesta en función del pasado porque el pasado no importa, y la historia no existiría si los mismos errores no siguiesen repitiéndose en el presente. El pensamiento abstracto es pertinente al conocimiento porque el conocimiento es algo completamente impersonal, y para enten­derlo no se necesita ningún ejemplo. La percepción, por otra parte, es siempre específica y, por lo tanto, concreta.

El estado de nuestro ser

A cada momento el conocimiento del hombre depende de su ser. Esto es lo que no entendemos. El hombre puede obtener sólo tanto conocimiento como su ser lo permite; de lo contrario su conocimiento será tan sólo palabras. Si el conocimiento se da a varias personas, una de ellas lo obtiene, otras no. ¿Por qué? Evidentemente, porque el ser de éstas últimas es diferente.

Cómo vivir una vida de satisfacción

En nuestra vida cotidiana, a menudo nos apresuramos en las tareas, tratando de hacerlas, tratando de terminar todo lo que podamos cada día, acelerándonos hasta nuestro próximo destino, corriendo para hacer lo que tenemos que hacer allí, y luego poder acelerarnos hacia otro.
Desafortunadamente, a menudo no es hasta que llegamos a nuestro destino final que nos damos cuenta de la locura que es todo esto.
Al final del día, a menudo estamos agotados y estresados por la rutina, el caos y el ajetreo. No tenemos tiempo para lo que es importante para nosotros, para lo que realmente queremos hacer, para pasar tiempo con nuestros seres queridos, para hacer cosas que nos apasionan.

Mindfulness es la mejor medicina

No necesitas dejar tu profesión para vivir una vida consciente, ya sea medicina u otro tipo de trabajo. En todo lo que hagas, puedes aportar la conciencia de tu respiración y tu cuerpo. Puedes unir cuerpo y mente, en lugar de mantenerlos separados el uno del otro. Cuando te pones de pie, puedes ser consciente de que estás de pie. Cuando estiras tu cuerpo, puedes seguir tu respiración y tus movimientos. Con la atención plena del cuerpo, tu escucha se vuelve más profunda y eres más consciente de lo que sucede a tu alrededor. Luego lleva esa conciencia a tu vida diaria ya tu trabajo.

Alcanzar la consciencia

El primer paso para la adquisición de la consciencia es la comprensión de que no estamos conscientes. Pero esta ilusión no puede cambiarse sola, pues hay muchas otras. Como dije antes, la peor de ellas es la ilusión de que podemos «hacer». Toda nuestra vida se basa en esta ilusión. Siempre pensamos que estamos haciendo, cuando, en realidad, no estamos haciendo nada: todo sucede.